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miércoles

Formulas anti -resfrios









Recetas infalibles :

1.-- Si el resfrío le ocasiona dolor de garganta, prepare una pasta con ajies picantes machacados con miel y aplique sobre la zona dolorida, durante un mínimo de media hora.
2.--El jugo de la hoja y la raíz del diente de león resultan especialmente efectivos para contrarrestar las irritaciones de las vías respiratorias.
3.--Si desea combatir el catarro, coloque en un recipiente tres cucharadas de alcohol fino y cinco de miel , batalas hasta lograr una crema espesa. Tome la mitad de este preparado en ayunas y la otra antes de acostarse, por la noche.
4.--Una excelente receta para la congestión pulmonar consiste en agregar 200 gramos de miel al jugo de cinco limones y tomar a lo largo del día, en dosis equivalentes a una cucharadita.
Jarabe de nabos :

Para combatir congestiones pulmonares y bronquiales, el jarabe de nabos resulta una receta tradicional como efectiva.
1.--Para ello, pique finamente cuatro nabos medianos y espolvoree sobre ellos 100 gramos de azúcar .
2.--Deje reposar toda la noche y a la mañana siguiente, recoja el liquido segregado3.--Guarde en un frasco de vidrio y beba cuatro cucharaditas diarias



La cebolla :

Este vegetal constituye un excelente antiséptico natural. Si simplemente comemos una ensalada de cebolla, los vapores que se forman en nuestro aparato digestivo y ascienden hacia la garganta, ejercerán sobre esta ultima un beneficioso efecto que aliviara molestias y dolores. Comer cebollas es bueno para curar disfonias (perdida parcial de la voz) y otras afecciones de las cuerdas vocales


"Shock" frutal de vitaminas







1.--Pele y corte tres kiwis y dos naranjas. Rocié con el jugo de una naranja, dos cucharaditas de miel y una cucharadita de jenjibre fresco rallado .
2.--Coma inmediatamente esta mezcla, pues si deja pasar mas de quince minutos, la misma comienza a oxidarse .
3.--No ingiera ningún otro alimento una hora antes ni una hora después de haber deleitado este exquisito y efectivo "shock" .La vitamina C contenida en el kiwi y la naranja, así como el efecto antiséptico de la miel y el jenjibre harán de esta simple preparación una poderosa arma contra los virus y las bacterias.


Baños de inmersión con aceites naturales :

Un baño de inmersión de 20 minutos de duración bien caliente, al cual se le habrán agregado unas gotas de algún aceite esencial, podrá ayudarnos de varias maneras a combatir el resfrió. En primer termino, generara una considerable cantidad de vapor que, al ser inhalado, descongestionara las vias respiratorias .
También, nos hará transpirar, lo cual hará que eliminemos toxinas e impurezas.Además, por supuesto, de gozar de los beneficios propios que proporcionan este tipo de aceites.¿Cuales son los aceites esenciales mas convenientes para contrarrestar molestos resfríos?, menta, eucaliptus, pino y alcanfor . Vierta quince gotas en la bañera y al salir de ella acuestese bien abrigado.

 Receta con ajo :

Pele unos ajos y coloquelos en la piedra de machacar y agregue un poquito de sal para que así queden convertido en una pasta, a continuación agregue agua caliente y unas gotitas de limón, se puede untar con pan o agregarle a la comida
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El que habita al abrigo del Altísimo Morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; Mi Dios, en quien confiaré. El te librará del lazo del cazador, De la peste destructora. Con sus plumas te cubrirá, Y debajo de sus alas estarás seguro; Escudo y adarga es su verdad. No temerás el terror nocturno, Ni saeta que vuele de día, Ni pestilencia que ande en oscuridad, Ni mortandad que en medio del día destruya. Caerán a tu lado mil, Y diez mil a tu diestra; Mas a ti no llegará. Ciertamente con tus ojos mirarás Y verás la recompensa de los impíos. Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza, Al Altísimo por tu habitación, No te sobrevendrá mal, Ni plaga tocará tu morada. Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, Que te guarden en todos tus caminos. En las manos te llevarán, Para que tu pie no tropiece en piedra. Sobre el león y el áspid pisarás; Hollarás al cachorro del león y al dragón. Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre. Me invocará, y yo le responderé; Con él estaré yo en la angustia; Lo libraré y le glorificaré. Lo saciaré de larga vida, Y le mostraré mi salvación.
Amén

Oración al Corazón Divino de Jesús por un enfermo





Dulcísimo Jesús, que dijisteis:
"Yo soy la Resurrección y la Vida", que recibiendo y llevando en Vos nuestras enfermedades, curabas las dolencias de cuantos se te acercaban;
a Ti acudo para implorar de tu Divino Corazón a favor de los enfermos, suplicándote por intercesión de tu Santísima Madre, la bienaventurada siempre Virgen María, salud de los enfermos, quieras aliviar y sanar en la presente enfermedad a tu siervo....., si es conveniente para su bien espiritual y el de mi alma.
Señor Jesús, que al funcionario real que te decía: "Venid, Señor, antes que mi hijo muera", le respondisteis: "Vete, tu hijo vive".
Sánalo, Señor.
Señor Jesús, que al ciego de Jericó, que sentado junto al camino te decía en alta voz: "Jesús, Hijo de David, ten piedad de mí", le respondiste: "Recupera tu vista, tu fe te ha salvado", y al momento vio.
Sánalo, Señor.
Señor Jesús, que diciendo: "Quiero, sé limpio", limpiaste al leproso, que te decía suplicante: "Señor, si quieres puedes limpiarme".
Sánalo, Señor.
Señor Jesús, que librasteis al mudo poseído del demonio, hablando luego con admiración a las turbas el que antes era mudo.
Sánalo, Señor.
Señor Jesús, que sanaste al enfermo que llevaba treinta y ocho años de su enfermedad, junto a la piscina de las ovejas, diciéndole: "Levántate, toma tu camilla y anda" y anduvo. Sánalo, Señor.
Señor Jesús, que delante del hijo muerto de la viuda de Naím, enternecido, dijiste a la madre: "No llores"; y tocando el féretro, añadiste: "Joven, a ti te digo, levántate"; entregándolo luego vivo a su madre.
Sánalo, Señor.
Señor Jesús, que dijisteis: "Bienaventurados los que lloran porque ellos serán consolados". Sánalo, Señor.
Señor Jesús, que dijisteis: "En verdad, en verdad te digo, que todo cuanto pidieras al Padre, en mi Nombre, os lo dará".
Sánalo, Señor.
Omnipotente y sempiterno Dios, eterna salud de los que creen, escúchanos en bien de tus siervos enfermos, por quienes imploramos el auxilio de tu Misericordia; a fin de que recobrada la salud, te den en tu Iglesia ferviente acción de gracias. Por Cristo Nuestro Señor. Así sea.